Una experiencia en busca de armonía
Tanto nuestro cuerpo humano, como todo nuestro mundo material, está hecho de vibración. Entre los elementos presentes en nuestro mundo, el agua es el más sensible a estas vibraciones o el que más somatiza.
El Dr. Masaru Emoto hizo una investigación sobre la influencia de la música y la intención sobre las partículas de agua y demostró el buen resultado que tiene la música armoniosa y la buena intención sobre el agua. El 70% de nuestro cuerpo es agua, haciéndonos más sensibles a las vibraciones y al mundo del sonido.
Cuando más harmoniosa es la relación de vibraciones en nuestro cuerpo, más bella y placentera se convierte nuestra percepción.
Esta es la propuesta de “Experiencia Polifónica”. Crear una experiencia placentera en nuestro cuerpo a través del canto polifónico.
Mi experiencia con la música polifónica me ha llevado a compartir aquello de lo que tanto me he beneficiado, el canto polifónico georgiano.
Ofrezco un método de acercarnos a la música a través del canto grupal. Esto abarca la música folklórica y el canto litúgico.
En talleres de 2 horas repartidas en diferentes días del mes, nos sumergiremos en busca de la armonía vocal entre los participantes, aprendiendo canciones y cantos de diferentes regiones de Georgia para sentir el carácter de cada uno.
¿Qué es el canto polifónico georgiano?
Es un canto en varias voces donde se busca una armonía particular dependiendo de la región de donde proviene. El canto polifónico georgiano data antes del cristianismo y es uno de los más reconocidos a nivel mundial por su gran versatilidad y peculiaridad, gracias a la diversidad de formas de cantar de las diferentes comunidades georgianas. Hasta el punto de haber sido declarado por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2001 y haber sido una de las músicas incluidas en el disco de oro de la sonda espacial “Voyager 1”.
Es un canto en varias voces donde se busca una armonía particular dependiendo de la región de donde proviene. El canto polifónico georgiano data antes del cristianismo y es uno de los más reconocidos a nivel mundial por su gran versatilidad y peculiaridad, gracias a la diversidad de formas de cantar de las diferentes comunidades georgianas. Hasta el punto de haber sido declarado por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2001 y haber sido una de las músicas incluidas en el disco de oro de la sonda espacial “Voyager 1”.